Dos cambios fundamentales en este local que tras casi una década de inaugurado ya requeria una actualización. El primero un nuevo piso, en este caso un porcelanato maderado colocado en espiga que es la base ideal para realzar el mobiliario espectacular que la firma ofrece. El segundo una iluminación mucho más cálida eficiente y de realce que le otorga una vista más teatral y tentadora generando pequeños espacios que cierran en si mismos envolviendonos en el deseo de crear esos espacios en casa. Nueva iluminación de la fachada que cambia radicalmente la vista especialmente en la noche despegándolo completamente del entorno. Una nueva paleta de colores y detalles de papel tapiz crean espacios únicos, tan únicos como nuestra propia forma de habitar.